viernes, 18 de noviembre de 2011

Los correlatos



He decidido votar a IU por una sencilla razón, en una conversación, me recuerda el interlocutor que el cabeza de lista es independiente, si, le conozco, he desdeñado a UPyD porque en la universidad el candidato al senado llama a un chaval con pañuelo rosa, compañero, tan falsamente, estos son gente ridícula. No he determinado mi correlación de ideas porque hoy no se si estoy por una España Federal o más bien Centralista.

Mi amigo de cabeza cada vez más egregia me hace una mención a mi opinión de ‘presente contínuo’ en mi vida, por lo que no veo ningún cambio de ciclo perceptible; acierta que esa percepción ocurre, no la realidad, y me recuerda al chaval que conoció hace varios quinquenios, igual me decía con efusión este verano otro amigo de verbo fácil y cabeza ágil.

El capataz de varios garitos me lo encuentro en otro, ha abandonado los anteriores, todos son del mismo sector: Hostelería. Es igual de estúpido que era, en unos ha acabado mal, en otros sigue manteniendo sus acciones. Le pregunto al del negocio de enfrente de la nueva empresa.

Ya nada volverá
a ser como antes. La mayor concentración de la convocatoria de Indignados para esta noche ha sido en Barcelona, ¿si?, Barcelona, desoíste por un instante las prohibiciones de 100 plazas en Madrid, es normal, ha ganado Barcelona. Omite tu aclaración el parte.

Se ha solucionado todo para lo previsible en días de asueto: Roma, París, Nueva York, acabamos por dónde empezamos, Madrid capital de España, coche de alquiler y movimiento rodante para Salamanca y Cáceres, alrededores y vuelta a la capital.

Sicario
llama el joven cubano a Los Castro, me cuenta parte de su vida, jamás haremos negocios, no por esto, me recomienda ver como el que hace que el que pesque una langosta tenga que tirarla o esconderla mientras él celebra el cumpleaños de sus nietos con una mesa llena de ellas y de vinos. Apela a Batista el joven y se va a Miami cuando quiere estar en Cuba.

He decidido dejar de formar parte del colectivo sin norte e informe, no sin cierta penuria por haberle visto nacer. Su suerte parece en ocaso, más uno siente que ya, visto lo visto, no es asunto suyo, nunca se pudo estar sin estar, esa gente no vale, los que están, ni a penas les interesa.

Volveré a poner en pie lo que el ojo ve y la mano reproduce, más de cinco años después, pedir opinión te mete en fregados, pero puede perfilar mejor el resultado final. Volver a entregar las tablas, desasosiega tanto como ver una reacción y oír un comentario. No eres tu por todo, eres parte, soy yo en un modo.

De los amigos enfermos una está de seudoalta, y otro sabe ya lo que tiene, a este le interesa más la calificación que la recuperación, una inconsciencia pacata, a la otra se me olvidó llamarla hoy.

Esperaba el fin de semana para unos planes que destrozan más su hoja de ruta que los putos posibles clientes, haré pues cosas interesantes: limpiar la casa y el coche, ver atardecer y echar un polvo si se tercia, planchar, y verme más gordo.

La sucesión de hechos, opiniones y adivinanzas no han hecho más que sentirme uno más, pero tan distinguido, que he creído una vez más que lo que me pasa a mi, me pasa sólo a mi, alterado por la influencia de todo lo que he puesto en la primera frase de este párrafo, ahora eso si, en ello , llevo parte e influyo, aunque siga sin creer en el pensamiento positivo, así dicho como un Ohmm-ohmm-ohmm.

2 comentarios:

castelo dijo...

No me parece mal estimado amigo de aventuras, como don quijote, salvajes son estos gigantes que cualquiera diria que son molinos, pero no por ello vamos a dejar de lidiar este trance que nos han puesto por bandera llamado crisis. Suerte a los tuyos porque al final serán tambien los mios.

Ébanen dijo...

En ese retailo de presentes y sentimientos se denota un áspero sabor a resignación. Y es cierto, como apunta J.L. Salvador, quijotadas a lo Sancho contra gigantes que son molinos que abrentan sus aspas sobre los campos de trigo. A lo mejor sólo salimos magullados, a lo peor las heridas serán heredadas.