En aquella sobremesa, en la vieja casa, donde nos salían así como así, algunas ideas y creaciones apetecibles le dije a Dork, que tenía la guitarra entre las manos, que hiciera otra ronda de acordes, que la melodía iba bien.
tres versiones “pero nadie se libra del pie forzado / hay que crecer bailando con sinsabores”, “Ojalá pase algo que te borre de pronto/ una luz cegadora, un disparo de nieve” y “Te doy una canción con mis dos manos / con las mismas de matar”.
A esa última dije sí.
-¡Ves Dork!, ahí, ahí, por ahí van los tiros “te doy una canción con mis dos manos / con las mismas de matar”.
Acabamos el ron y la lima. Seguimos con una rueda de rancheras, un tango, eso tan recurrido del folklorrr que en realidad fue lo que nos animó la tarde. A decir verdad junto a la lima, el ron y ese café de puchero que tan bien le sale María Pía.
(Versos de canciones de Silvio Rodríguez)
martes, 10 de octubre de 2017
jueves, 5 de octubre de 2017
La perdición
El tiempo, testigo de mi amargura, cantaba el cantaor.
Por qué cambian las configuraciones de todo esto y me hacen perder tanto tiempo.
Analógicos, manuales. Anda y dales.
ESTO ES UNA TONTERÍA, POR LA ALEGRÍA DE HABER PODIDO ENTRAR AQUÍ.
PIRULÍ.
Por qué cambian las configuraciones de todo esto y me hacen perder tanto tiempo.
Analógicos, manuales. Anda y dales.
ESTO ES UNA TONTERÍA, POR LA ALEGRÍA DE HABER PODIDO ENTRAR AQUÍ.
PIRULÍ.
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