miércoles, 5 de octubre de 2011

Las señas de identidad y el proyecto de vida


En la Cadena Ser dicen que los solteros viven menos años, y que los que viven solos envejecen más. La Cadena Ser es una gran alegría para la nueva especie: SINGELS, que son (somos aunque mis señas me desavienen) un filón para el consumo. La esperanza es nula pues. Qué asco.
Yo no creo a la Ser a pies juntillas, ni a Guayoming, ah, ni tampoco a Punset. Pero unos intervinientes en la radio decana dijeron eso y los otros le dieron la razón, era en el programa de Angels Barceló, en dos momentos distintos de este largo verano en el que he estado mirando fotos y masturbándome, como algunos sabrán.
También hice algunas otras cosas, ir de visita, ir de paseo y trabajar, que es un orgullo trabajar, aunque no cobres porque unos se hacen los remolones, otros los despistados y otros te dicen en tu cara que no tienen, así que esperes mejores momentos. Hay, mejores momentos (nunca volveremos a ser como antes, también dicen en la Ser). Que copla más bonita la de aquel verano ‘Ya nada volverá a ser como antes…’ era de un grupo flojo, tipo Los Refrescos. Ahj… Los Refrescos, tienes más años que Esperanza Aguirre, idiota, de esos te acuerdas tu y el del coche de caballos de la Plaza Circular.
Estoy en retirada, me dediqué a la farándula y las columnas buenas las firma con mi nombre ese cabrito que se llama David Gistau en El Mundo, una la de la despedida de Zapatero, que parece me robó todo menos el titular, después de la última sesión de control al Gobierno, porque España sigue teniendo Gobierno, saben, con un consejo de ministros reducido de segundones.
Zapatero se ha ido, y el otoño caliente que empieza por darle la vuelta a los posibles programas electorales es una respuesta a la hora del cierre de los negocios, una prédica en el desierto, mis amigos los estrategas dirán: una medida para ver el día que esto vaya en serio, la convocatoria, y lo que va en serio es que un colega recién llegado al paro tiene fecha para hacer su cartilla 14 días después de su despido, y si se le pasaran los 15 que por determinación tiene, no pasaría nada le contarían desde el día de la carta del adiós. Qué alivio. Hoy lo que está holgado es ir a pedir una vida laboral.
Una vida laboral es lo que han perdido cienes del soe después del 22 de mayo, lo decían también en la ser “la dinamitación de la representatividad en instituciones locales y regionales ha dejado a muchos hombres y mujeres sin su proyecto de vida”. Cómo lo ves Maribel. Yo no quiero fundir el queso ¿quién me ha robado mi queso? Pero es espeluznante que el proyecto de vida (laboral) estuviera en esa mies, lo cual no es ningún descubrimiento, hasta que llega la vía de retorno.
Los del PP, ya saben, pasando el cuters por todos los sobres cerrados que dejaron los anteriores, dándole la vuelta los cajones y encontrándose como aquella lápidas de La Colmena creo en el envés de los veladores, realidades o avisos. Quienes les han elegido no lo han hecho para que nos preparen la mortaja, sino para que vayan contratando los convites de bautizo, comunión y boda, bonicos que sois mu bonicos.
Me salté mi protocolo y me fui a comprar el libro de Mariano Guindal ‘La caída de los dioses’ simplemente porque no habla de este tiempo, sino de todo lo antedicho-hecho, desde la muerte de Franco hasta la llegada de Aznar, todo en clave patronalsindicalismogobernante, y sobre todo porque el periodista a cuenta de la Familia Godó, que mantiene el muy serio periódico La Vanguardia, dijo al final de su intervención en la radio (en la Ser) que se jubilaba a sus sesenta por tres cosas: tiene sesenta años, un cáncer y ha adoptado un niño chino, dijo el nombre, y, esto no lo dijo, porque los patronos Godó y algo más le habrán posibilitado su salida airosa. El libro me tiene enganchado.
Me compré un MP3 por no seguir siendo un retrasado, y ahora no suena lo que me instalaron dentro, porque es todo tan chico, yo tan… que ya ven. Ah, antes de irme quiero mandar a la mierda a los que dicen que nuestra solución de vida es el Decrecimiento, a estos que los zurzan, y también descubrí en estos días que escribía en corto, lo que son las sociedades de consumo, unos clubes privados como pueden ser las peñas taurinas o el club de golf Alborán. Esta es la verdadera sociedad del bienestar unir el decrecimiento a una cesta de la compra entre nosotros, ah, y follar con la más fea. Menos mal que me cayó un egipciano que me quitó las tonterías en tres horas. La pena que se fue, no se si ha reinventar un partido por allí y buscarse un proyecto de vida fuera de tontunas burguesas que aún tenemos en la cabeza o por no participar en nuestro otoño caliente que hasta el 20N parece una broma.

2 comentarios:

Tesauro dijo...

Por creer en Dios bastaría, o en Jesús de Nazaret al menos,porque el vivir sin.. o con..seres de mil y una madre ni alarga ni acorta ni aglutina o dipersa el yo, en medida tal está la supervivenvia, con ella la longevilidad del individuo, que como ego aglutina la boracidaz social;ahí está el morirse solo o mal acompañado.Y tan cierto como masturbarse,no hay más!.
A alguien nos robaron el mes de abril;solo nos quedan once meses por vivir cada año,a los que no quizas el paro y doce meses por buscar lo perdido encontrable;por quejarse se es escuchado por llorar ser mamado.
La transición siempre asombra,será por el humanismo cristiano o por la democracia idem?;nos queremos bajar del burro y solo nos cabe ir andando...y lo peor es que el burro ya se ha muerto;pues a gastar suelas!
Aparece la envidia"siempre" y cuando menos esperada es, a ver si me cae algo(gentilicio,o lo que sea) y me destonto tambien.

castelo dijo...

Ah, ¿existe la radio todavia?, quizás ahi está el problema, si no existiera, no escucharias tantas tonterias, que somos mas viejos, pues claro, , que vivimos menos años peus claro tambien, o nos creiamos que no ibamos a pagar todos los excesos cometidos por la ciencia (comidas que no son comidas, ir cada vez mas deprisa, tecnología que sabe hasta cuando vamos a follar, ...). el proyecto de vida ya por desgracia no lo hacemos ni decreciendo ni creciendo, nos lo hace Microssoft o IBM me da igual, pero son ellos los que han planificado nuestro futuro.
Mira lo de Marruecos que alli puede estar el arca perdida.