lunes, 31 de diciembre de 2012

Toro ensabanao


Me presento ante ustedes pisando uvas, abrasando sarmientos,con la insuficiencia hepática de una oca del pais vecino, con los pies helados y las cejas largas. 
Me presento mas no puedo pasar de largo, para que se den por enterados, ante la inopia larga que les viene arrastrando. Me quedo quieto pues el toro ensabanao, bonito pelaje, ridiculo gorro rojo con borlon descreido e inmortal, adornos puestos, por estar ya disecado. 
Me presento, les digo cuan una retahila de botellas zanquilargas, cuelliformes, cristalinas, turbias, esmeriladas. Vengo, no lo dije, de sentarme ante las calles de Agua y Vida, en Sevilla, habiendo olvidado en la mesita, al amparo de la crema de talones: '44 cartas desde el mundo líquido', un brick blanco. 
Me presento, cabrones, y lo menos que debían hacer es levantarse a saludar. Después consuelensé con sus refranillos: 'para hombre joven noy hay trampa vieja'... jam... no conocemos las vidas heredadas, anteriores, la aniquilación de uvas y aceitunas, todas juntas y a pilón. (el portón del callejón oscuro).
Las sillas son hoy también ensabanadas, atractivas y con vetas sin definición, y quizá muerdan o embistan, y con todo te esperan, y las quieres. También los tangos de negros devinieron en claqué, y esto en break-dance. 
Un toro ensabanao se ha tragao un hígado de oca, y hoy como una bacalá desde la estancia alta, viendo a los bebedores, saluda como una bacalá. Aquí estamos, lildiando con trampas: fiesta. Levantaté y saluda. Lidiando también con manufacturas, créditos y deudas: la fiesta. Levantaté y saluda.
Un toro ensabanao viene con un trece en el lomo y un doce en la sién. Vivo, vivito: levantaté y torea.
PD: El toro, por mi madre, se llamaba 'Sortilegio'. Mandan huevos las mañanas frías de Sevilla, las últimas horas de un año, y los primeros minutos de un día.

sábado, 15 de diciembre de 2012

Me troncho



“Entonces, «La Niña de los Peines», se levantó como una loca, tronchada igual que una llorona medieval, y se bebió de un trago un gran vaso de cazalla como fuego, y se sentó a cantar sin voz, sin aliento, sin matices, con la garganta abrasada..., pero con duende. Había logrado matar todo el andamiaje de la canción para dejar paso a un duende furioso y abrasador”. Es bonito, verdad, lo recojo de una conferencia que sabía había dado Lorca, y buscando, buscando he encontrado otras, muchas otras  conferencias que me guardo para esta Navidad.
Me troncho yo, no de risa, me troncho quiere decir me quito una parte, me desapego de un todo para intentar subsistir si el 21 del doce nos deja seguir viviendo.  Así que parto piñones con lo que he venido haciendo y me deshago en halagos para intentar trabajar menos y cobrar lo mismo, contribuyendo menos, esto no es una amputación, no, es un dejarse ir y subsistir como una mata mu ‘gitana’ que dice mi amigo el bien leído, lo cual se traduce en que crece en cualquier sitio y de cualquier manera, y entre esas aduce está ‘la mata del dinero’. Si, la mata si, el dinero EJEM.
Como yo no creo en el ‘Dios proveerá’ que dice una recién llegada. Ni que estemos en Natividad ni en el sepulcro del Jueves Santo. Decido humanizarme a lo cual y contra toda mi teoría: ‘El hombre es el animal que mejor se adapta’, y así lo haré: menos en el debe y lo mismo en el haber (esperemos). Ya que no espero una jubilación, ni zarandeo a coches de concejales por el aparato de los dientes de mi niño y las gafas de mi suegra.
Me troncho por si germina algo nuevo. Estuve una vez ante un árbol gordo que partió un rayo, no recuerdo ni con quién, ni dónde, si, quizá en Jaraíz de la Vera y con Dieguito. Bien, allí brotaron unas ramitas frondosas. Ojalá retalle yo mismo.
Pero amigos tampoco creo ya en el Ojalá, o sea que me-les estoy engañando. Me troncho para poder ir pensando en otros plantones, en hundirme en la tierra y salir con fuerza a la atmósfera.
De aquel ‘Ojalá’ que me asalta cada Pascua de Navidad no queda más que el ritmo monótono como el de la seguirya de la insigne cantaora que se troncha, porque el ritmo del cubano es así, comunista aún, deja un tiro en el aire con el verso: ”ojalá las paredes no retengan tu ruido de camino cansado/ ojalá que el deseo se vaya tras de ti/ a tu viejo gobierno de difuntos y flores”. Y después de eso uno piensa que va a nacer algo nuevo, diferente, distinto.
Y como tengo que autoconvencerme, como todo proceso psicológico, donde viene un cambio motivado por uno mismo, inducido o provocado, me troncho porque ‘Antes roto que doblao’ como cantara el de la Isla y pusieran en el grito los comunistas de cuando entonces, ambas cosas para camisetas del hoy en los festivales de rock (si es que siguen existiendo).
Y una última cuestión por si no me da por posar mis repelados dedos sobre el teclado antes de que el 2013 nos esparza las cenizas de este año y las estrellas doraditas de si mismo. Es absolutamente ridícula, conservadora, y cobarde, la forma en que mis allegados están defendiendo su forma de vida en este sistema, yo tampoco (como dijo aquel alocado pintor, cuando quería decir ‘yo también’).
La sociedad a que aspiramos no sé cómo está quedando, ahora a mi no me parte por medio porque antes mato. La alegría de los pobres era una buena pregunta para hacerle a los misioneros en la entrevista, yo hasta les esbozaba media mueca de sonrisa cagándome en su putamadre.
No acabo el año amargado, más tampoco resignado, lo acabo frío, ridículo, con los números que cantan, que ni beben cazalla ni se quedan sin voz, ni se doblan estilo medieval. Somos un árbol del camino. Queremos perseverar, pero las arenas son movedizas. Todo ejercicio progresado necesitó reflexión y desapego, incluso partir el queso. El adocenamiento es lo peor de nuestro estigma: “matar todo el andamiaje”, qué cojones tuvo Lorca, claro, era una conferencia.
Esto también. Espero al menos no haber aburrido. Os quiero.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

El hombre arrojado



Sallió al balconcillo, con ímpetu quizá, dio un barandazo, cayó a la calle y murió. Ocurrió en Dos Hermanas, Sevilla, el hombre despedía a su hijo que abandonaba su casa quizá en la visita semanal, eufórico o resignado, en el adiós del último vistazo. El parte oficial dice un cúmulo de circunstancias: forja mal agarrada en un piso de diez años, una guirnalda de luces de Navidad, y no lo explican bien, pero se refieren al peso del hombre. Un hombre muerto. ‘Gira, el mundo gira’.
Javier está borracho pero atento, me cuenta quien es el magnífico intérprete de esa canción, diré yo Napolitana que me recuerda a Mari Samper desvistiendo su cara de clown, la grandona actriz catalana de la que ¡Ya quién se acuerda! Nos queda la Sardá con registro parecido. ‘Gira, el mundo gira hacia el espacio infinito’.
Yo le podía atribuir a Francisco o a Raphael la canción pongamos de tono italiano ‘El mundo, que no ha parado ni un momento’, y ahí sostiene el tono. Metemos un zapateao, con más gracia que el Cascanueces, que lo hará el Capullo de Jerez, enjuto, loco, de mirada distraída, a compás por bulerías: ‘Hacia el espacio infinito’, y nos falta un enano, o seudo: Arévalo que nos dejó un montón de cintas, haciendo palmas con su falsa risa de oreja a oreja.
El cantante que mi amigo que bebe me determina lo tengo en la mente y no recuerdo su nombre, la canción sigue, llena de vida, subida de tono, en el repertorio podemos meter a cualquier otra voz menos a Maria Dolores Pradera, que siempre está medio muerta cantando, ni a Perales, ‘con amores que comienzan, con amores que terminan’, coño, mira a Amaya de Mocedades le podemos dar este verso.
El hombre salió a darle el adiós a su hijo y con el gesto del saludo encontró la muerte. ‘Gira el mundo gira, en las calles en la gente, corazones que se encuentran’. Esto no es un cuento de Natividad, pero podría serlo. Le echo mucha fuerza de gravedad a pequeñas cosas (no me jodan, se que estamos en un terremoto) y apisono y prieto los dientes cuando a lo mejor no merece la pena por lo que lo hago. Albano me dice con las sílabas muy remarcadas, al oído que tengo de gente como yo ‘Ellllllllllllll, Munnnnnnnnnndo, Que no haaaaaaaaaaaaaa parado ni un momeeeeeeeeeento’. Me voy a llevar la guía a la imprenta.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

El hombre disuelto

Hace un año, un escaso año, cuando en su León le hicieron una cena despedida en plena campaña, como cierre de campaña. Las palabras del hombre hoy disuelto fueron parcas, y la cena de pobres, yo vi las fotos de las bandejas con las cosas. Fue una cena de campamento. Pacata más que austera.
Se iba así, sin más, el denostado para la campaña por la situación que había dejado en el último medio año, medio año anterior. En el sarao de León, de la fiesta de los mineros esa de Rodiezmo, a lo primero subía el puño, a lo siguiente se contenía las manos atrás, y a la última ni fue.
No voy a glosar todo lo que hizo por nosotros, con nosotros, para que no me abran un expediente, jajajaja, si no lo hago es porque no es lo que me motiva, me motiva ver cómo ésta inmediatez, este todo en directo, vivífico, nos ha hecho tornar a este novísimo diputado que era ‘Bambi en el matadero’ en una estampa en sepia, de la segunda república entre almidón y barbería, su carita algo envejecida en sus segundos cuatro años que no concluyó.
El hombre disuelto andará no sé por dónde, su mujer seguirá cantando bello en los teatros del mundo y ni para los contrarios tiene ya nombre, lo que tenemos no es herencia de él, sino del grupo político que lideró.
Un hombre sin ocupación no es nadie, una mujer tampoco. Cuando se está replanteando en el ideario general, que acaba con las oes de obreros, si en lugar de huelgas se necesitan manifestaciones, concentraciones; plazas fuera del horario laboral, como un anexo a nuestras vidas productiva, que creíamos el centro de nuestras vidas generales, este Luis Yepes se acuerda de los chuscos de pan en las bandejas, eso sí, embolsados, de las mesas con manteles de papel, de las palabras últimas del hombre que se iba: “La cabeza alta, el orgullo en el corazón, la humildad en la mirada, la confianza en el futuro, en España, en nosotros, en León, con vosotros, hasta siempre”.
El viejo dinosaurio llevaba como lema ‘Pelea por lo que quieres’. El hombre disuelto que fue hombre de Estado erró en los últimos seis meses, incluso en el último año, pero mi espejo con su azogue detrás me recuerda aquella expresión: ‘acuérdate cuando entonces’, que a día de hoy en mi camino no me ha tenido que decir ningún compañero de viaje. Hizo mal todo lo último, estará purgando sus penas quizá en un pabellón de reposo, pero con su pijama de cuadros debería salir a decir algo sobre esto que nos ocurre hoy. Las radios estarán ya tras de él; me da que se va a esperar un poquito más, cuando tengamos en el túnel la hora absurda, o quizá  no lo hará nunca.
Un día oí, perdonen no recordar sobre qué político, llamarle a este del que hablo que no tiene nada que ver con el anterior: “hombre disolvente”, entendí que difuminaba toda su trayectoria a cada paso, si, lo de Groucho Marx “si no le gustan mis principios…” Una lindeza.
También oí decir que al negro reelegido en EUA sería un excelente senador, pero un pésimo presidente, y ahí está. Verle llorar le humanizó más el otro día. El asunto de nuestros males puede ser otro, pero hoy quería hablarles del hombre, a la postre de los hombres. De las máscaras del hombre: la persona; y de los ejemplos: el planteamiento de su obra. También hablarles del olvido: la metáfora de nuestro tiempo.
De la anterior Huelga General hace siete meses, más ya de eso quién se acuerda, pasado mañana turrones en los super’s y en veintiún días otro puente.
Le quitamos la o a las huelgas y nos vamos a la plaza en lugar de al gym. ¿Cuál es el peso de las cosas?

jueves, 25 de octubre de 2012

Retrato familiar

Entré. Eran bonitos los escaparates, objetos barrocos, clásicos. No había nadie. El hombre apareció a mis espaldas abriendo la puerta de su tienda “estaba en la ferretería”, me explicó. Me cayó bien, un intruso que el supondría potencial cliente merece una explicación. Yo le suelto mi soflama a la que atiende con cortesía, con cierto interés. La decisión como ocurre en estos casos recae en su mujer, que, si, es la que atiende aquel negocio de las maravillas; él es ebanista, y tiene una hija, y esta niña ha hecho Administración de Empresas, y se va a preparar las opos de la Dipu (el hombre no hablaba así) y está en una depresión, porque si él supiera qué podría hacer, una tienda con cosas más modernas; en las opos hay pocas plazas, hay gente estudiando más tiempo. Le argullo que hay subvenciones de hasta 9.000 euros para mujeres menores de treinta y cinco, su hija tiene veintisiete, se interesa, le digo dónde enterarse, saca la revista ‘Despertar’ de los Testigos de Jheová (creo) de debajo del mostrador. Volvemos a mi soflama, está bien, pero las cosas están mal. “¿y dónde dices que está eso? “ Le dibujo en un blanco de ‘Despertar’. “Es que no hay nada, ha venido uno a ver si se pueden quitar las multas, están las cosas mal, ya ni quitan las multas”. “Si pudiera ser, si dieran eso, pues mi hija se podría quedar con esta tienda, o poner otra. Yo he pensado mil veces ahora hay fábricas que hacen los muebles en basto y uno le hace unos detalles, si yo tuviera menos edad, me quedan tres años para jubilarme, yo tengo terreno atrás hacía una gran nave, ponía ‘Fábrica’, la gente al poner eso cree que paga más barato, y mandaría fuera”. El hijo del hombre a los 22 años se hizo policía municipal del municipio, no le gustó nunca el oficio, dice que los aprendices no existen “para que hubiera un aprendiz tendría que haber tres oficiales, así aprendería, con uno solo, y los costes…”. Llega la mujer, “bueno, ya ha está aquí la jefa” (digo yo). “Si, mira, esta revistilla, un anuncio por ochenta y cinco euros”. La mujer la mira la revistilla, la remira. Sé que va a decir que la cosa está mal, pero creí que el hombre la iba a contradecir, no a desmentir. Le explica lo que le he orientado para su hija (“primero las oposiciones, si no pues eso, ella se puede quedar con esto”). El hombre está pensando que su hija lo contrate a él estos tres últimos años de su vida laboral, mayor jubilación le quedaría, no lo dice. La mujer no duda, “no”, ni que le hubiera colocado a la hija. El hombre no tiene prisa, me mete al taller, yo he de irme a buscar mi pan a otro lado, hablamos sobre unas piezas, su materia: hechas en Salamanca, copias de tallas y repujados, resueltas en resina. Nos emplazamos los tres para noviembre, la mujer no quiere gastar, entonces quizá tampoco. Ni al amigo le quitarán la multa, ni a mi me hicieron el anuncio, ni quizá la hija, aunque salga de la depresión, ponga ninguna tienda. El matrimonio a unos pasos de pasar a su vida de asueto se quedó allí, con sus escaparates y sus buenos terrenos detrás donde se podrán hacer más naves y más producción; su hijo se colocará el uniforme mañana, la chica de la depresión intentará aprenderse los temarios y yo volveré en noviembre. Me da que el alcalde del pueblo podrá hacer algo por las opos y que el ebanista y la vendedora no perderán la ocasión. El final del cuento no lo sabe nadie, pero el presente de estos sesentones es halagador. Yo, les importo poco.

sábado, 13 de octubre de 2012

Testimonios

Mi testimonio no vale nada, el suyo quince euros al año. Así lo ha puesto el grande de Arcadi Espada, me despisté en vacaciones, he vuelto a este octubre sobrevenido y su blog, los ‘Diarios de Arcadi Espada’, su uso… y… disfrute valen eso pagando por paypal, o le escribes y te explica cómo de otra manera. Hace muy bien, no cuento con él más que en las páginas de El Mundo, y mira que eran profundas, oscas y graciosas sus cartas a ‘querido J.’ para entender el catalanismo, hoy más necesario que nunca; cartas que no desvía al diario impreso. Nada, que le den./ A mi me gusta mucho esto, que uno decida hacer eso en plena crisis, que se pondere y se valore. Nunca llegué a saber si realmente el maestro Umbral cobraba con el euro 700 diarios de lunes a viernes por la columna (un folio como él decía) de ese periódico de derechas en la última. Si fuera así qué gloria para España, María España, su viuda./ En estos días de hambre los reconducidos del oficio que no pasamos de plumilla tenemos una salida como comunity manager (perdonen mi inglés, si emigro habrá de ser a Chile, Argentina o Cuba) osea según entiendo, por un antiguo compañero que ha venido a formarse sobre eso, en gestionarle a empresas sus perfiles de redes sociales, su blog, su web. Qué vergüenza de oficio contando características con una chuleta, con unas líneas rojas sobre qué no decir, con un dossier sobre cómo preponderar o convencer. Ese es el caso, no como creía el bueno de S. que suponía hacer cuatro notas laudatorias y poner el cazo a la parte contratante a final de mes. Trabajar como los chinos dijo, jajaja, si con seis ordenadores o veinte ventanas abiertas a la vez./ Los plumillas no tenemos testimonio ya que echarnos a la boca, ni nuestro ni ajeno, y a los que lo tienen hay que colgarlos, contradecirlos, remedarlos. ¿Saben lo del New York Times? su report que ha dolido por las fotos, no se lo que decía, supongo que estadísticas y declaraciones de afectados, paupérrimos. Bien, para contradecir eso, como adalides de buen español, IDEAL ha ideado NY no se qué, y la gente está mandando desde hace días fotos felices: cumples, tardes de playa, risas de feria que creo les están mandando a dicho rotativo, pero dentro de todo asombro, el experimentado Luis García Montero publica por hoy un laudato sobre la esperanza, que está bien, pero que también tiene el fin de remedar el report que nos ha puesto a los pies de los caballos. Válgame el Señor la poesía de la experiencia./ De mi parte decirles como crónica de ciudad regalada -ya dije al inicio-, que en una bocacalle de la mía vinieron y detuvieron a unos pocos, y después más coches de la pasma por líos de locura de uno y de griteríos de otr@s; que las alcantarillas que robaron unos chatarreros las han sustituido por otras que no se por qué no tragan, y que la señora de S. no me perdona lo que se supone que dije de la niña adoptada./ Queridos lectores, a lo que nos depara internet, qué pena no ser ni Espada ni Umbral. Y es que Mari, el mundo está m’u mal repartío.

jueves, 4 de octubre de 2012

Lo urgente y lo importante

Hacía un día apacible, con la pareja de amigos convenimos ir a los pueblos de la comarca, ellos tienen una casilla, mi hermana un cortijillo, pasábamos un día de asueto, bicheaban su posesión y conocían el cortijillo. Comimos migas porque llovió los días precedentes, las hizo mamá sobre la hornilla de luz, el sol daba en los bancales, volviendo del pueblo de al lado amenazaban unas nubecillas, seguro pasajeras, estábamos con el codillo del día anterior y el buen vino de la bota, y las cervezas baratas y el comedor incendiado y paciente, y las granadas ya desgranadas para después, cuando sonó un móvil, y a mi cuñado le dieron una mala noticia: la hija de unos amigos se había intentado suicidar. Muy amigos. Salió pirlao. Los que quedamos hicimos nuestros comentarios, yo aventuré, que si no lo había logrado no lo quería. En dos horas era una realidad el delito. Se enturbió la tarde. La casa de mis amigos tiene una viga de madera descabezada, se quedó aquello apuntalado como pudimos, y ahora piensan invertir sus vacaciones, por estas fechas en ese menester y gasto Segovia era otro destino, los aviones a Madrid son cada día más caros. En aquella empresa del hombre pasajero, a final de la reunión en que se planteaban las tareas para hacer dinero siempre se calificaba ‘prioridad A y prioridad B’. Había aprendido en un cursillo de gestión neocón. Todo se resolvía de otra manera, pero era importantísimo para todos la calificación. Allí mismo aprendí lo que me ha servido para mi propia administración: cuentas A y B. Decido irme andando cruzando la ciudad prefiero gastar más zapatos que gasoil, pero esta cuenta no estará bien hecha, como tampoco si es mejor poner en marcha el secador del baño comunitario o tirar del rollo de servilleta, o cambiar las toallas chinas cada hora. Decido irme andando porque tengo gusto de espartano, a veces me gusta incomodarme. En el paseo de Almería, en un taxi, atrás se sube un conductor de autobús, con su camisa bordada ‘Surbus’. La moraleja sería que con la crisis se nos ha quitado la prisa. Somos impepinablemente cada día más pobres. Cuando conozca de veras las nuevas sensibilidades: mercadillo ecológico el 13 en Abla, senderos de luna llena, varios pueblos para la próxima que salga, retiro de yoga, no se ni cuándo, ni dónde… que el 21 de diciembre se acaba el mundo. Les daré otra plática, tranquila y llanamente, sin urgencia ni importancia. Sino porque me salga de los cojones. Hemos terminado el consejo de dirección.

sábado, 22 de septiembre de 2012

Mar de amores

La hermosa historia nos la presentaba así: “Sola, sola, en el olvido/sola, sola con su espíritu/ sola, sola con su amor el mar/sola, en el muelle de San Blas”. No les tengo especial aprecio a Maná. También era hermoso, porque no nos ha tocado, aquella ‘Penélope’ de nuestro mediterráneo Serrat. Las cosas pueden ser hermosas y desgraciadas a la vez. No voy a decir a un tiempo, porque este a la vez sólo quiere decir ‘a la par’. Hace no tanto tuve el criterio de intentar hacer un homenaje al mar que se ha quedado en un cascarón. Mi profesor de pintura bien lo hablaba, hay pintores que se quedan en el cascarón, quién no: Velazquez, en Velázquez hay mucha pintura más allá del sfumato, y todo contenido en las veladuras, pero hoy no se pinta como Velázquez. Decía, no me pierdo, que he centrado en un tiempecillo mi quehacer en el mar y he pintado unas sábanas. Cuando tuve que hablar sobre esto, ante los que iban a ver mis pinturas me limité a decir: “mirar el mar es un acto íntimo, y el mar es la génesis y el epílogo de muchas cosas, también del amor y de la muerte”. No quise abundar más porque allí estábamos para enseñar y vender cuadros. Pero, heme aquí que los asaltos de la vida me han puesto frente a mis pensamientos, que se pueden resumir en que el mar es la apología de la muerte y la abreviatura del amor. Hay toda una tradición sobre esto, especialmente sobre la muerte, y la finitud sumergida. Dese Alfonsina Storni, que une las dos cosas, hasta aquellas coplas de Manrique. El mar ha sido muy influyente en mi vida, también el amor y la muerte, esto último creo que en la de todos. El mar es un soliloquio siempre y el amor pensado también, y la muerte sobrevenida… supongo. Miro la mar en femenino y me invento vidas, viajes y más desesperanzas que esperanzas, no les engaño. Y he pintado sábanas porque no soy parte del mar, ni un tritón o una sirena, ni un pescador de bajura o un surfista. Yo miro al mar con respeto como un bañista, y a mi, y a los otros, Dios sabe lo que les deparará. Por eso me atrae, me atraen tantas cosas que no comprendo… De la prensa española, sólo el ABC y La Razón l
e dan un destacado en sociedad a esta señora: Rebeca Méndez Jiménez, la protagonista de la copla, quien perdió a su amor comido por el mar tres días antes de matrimoniar. La mujer vendía en el Muelle de San Blas golosinas, juguetillos y ‘curiosidades’ y estaba trastornada mentalmente, según informa un guía turístico local de Nayarit, México, donde está ese muelle. La mujer ríe mellada en la foto y presenta su mechón de pelo blanco. Sus cenizas van a ser arrojadas desde el lugar en que partió su amor, y donde se ganaba la vida, en unos días. La hermosura no está reñida con la desgracia. Yo plancho fundas de cojines y busco en los cedés que ni están rallados ni están perdidos; sale Amparo Sandino cantando ‘Mar de amores’ una copla que nada tiene que ver con lo que explico y siento, que es un aviso de monogamia y obediencia. Yo tenía mi título para justificar unos párrafos y una idea de por qué hay muertos que no nos devuelve el mar. Y ahí me resigno, él es todo, menos el olvido.

martes, 18 de septiembre de 2012

Santiago

Tenía pensada otra cosa, pero me ha dado rubor finalmente. Oía a Santiago Carrillo cada martes por la tarde en La Ventana con Genma Nierga y Martín Villa, se lanzaban sus complacencias los dos políticos, y me entregaba y apreciaba lo que cantaba el exdirigente comunista de la actualidad, de la situación, y a su defesa de Zapatero, también últimamente sus equívocos, en esa radio. Cuando Murió Marcelino Camacho dije que iba a poner a caer de un burro a este viejo socarrón y leído, de una generación de políticos hechos en la cultura, no en el dossier de última hora, pero a eso, última hora me ha dado rubor. Oí por primera vez hablar de Santiago Carrillo a mi abuelo Pepe, como le oí hablar de muchos otros de la transición, del exilio, de la Pirenaica. De Pasionaria hablaba más y mejor mi abuela. Santiago Carrillo fue la dignidad hasta que dejó después de cincuenta años su partido para fundar otro, ya metido en los ochenta años de su propia vida, esto es un hecho injustificable y peor ingresar a sus seguidores en otro partido a su vez, el PSOE, y él quedarse fuera. Con todo era muy lúcido, y sobre todo había vivido situaciones, realidades e ideas que le posicionaban en la capacidad para un análisis rápido, claro y vertebrador, y más allá de aquello en la formulación de alternativas que en la época que yo le escuchaba, fuera de toda responsabilidad, pero con el peso heredado de la representatividad, le hacían valedor de aciertos , nunca en tono de excátedra. De sus desmanes, advenimientos, desentendimientos y luchas, Vázquez Montalván hizo un gran retrato de él y de los otros culturetas del exilio de fuera y el interior en ‘Pasionaria y los siete enanitos’, que les recomiendo a los interesados lean. Por último decir que es una solemne pérdida la suya, y a la par fueron deshonrosos su desentendimiento y su ‘ingreso’ en el partido de al lado. Que serán inolvidables sus gafas de sapo y su risa de niño desdentado, y su retranca, que tuvo un semblante machadiano, y que acertó aquel humorista que escribió, cuando el nombramiento de Gerardo Iglesias, que duró un asalto: “… al volver la vista atrás, veo a ese chico, Gerardo, que jamás debí nombrar”. Y una última cosa: el Partido Comunista de España ha sido el mejor surtidor de las cajas de galletas del resto de partidos. Y otra pos-última, la debacle de 1982 fue injustificada: la gente piaba, y pía y se va a otro comedero. Buenas noches.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Tengo la intuición…

Yo no estoy esperando que Eurovegas venga a mi cochera, pero tengo una intuición, perdida esa esperanza, me viene en lo alto hacerme sabedor de que ha dimitido la artífice del negocio para Madrid, y también no se equivoquen, de los Teatros del Canal, para los que ironías de las suyas: nombró como director a Albert Boadella, el denostado en Cataluña, que, también ha dejado la dirección de su grupo, el llamado a ser el grupo Teatral Nacional de Cataluña. Ha dimitido Esperanza Aguirre, ya lo sabrán, una repipi que los compañeros de cuando éramos compañeros llamaban ‘La tita Espe’, cuando dirigía la educación en aquel primer consejo de José María Aznar, y mis compañeros lidiaban en los consejos escolares, contra sus propuestas. Ha pasado el tiempo y esta jovencita liberal ha sido una sucesión de políticas que yo no veo más que en populismo cuando voy a Madrid, porque no conozco Madrid, pero que ha dado, mucho, muchísimo juego como parlamentaria, en todos sus cargos, en todos sus rifirrafes, ha sido, es, y seguirá siendo -ahí mi intuición-, una concitadora de opinión, una trabadora de elementos comunicativos, como pocas quedan en las siglas de su partido, y por supuesto no existen en el de enfrente, a todo caso aquella inteligentísima Carmen Alborch. Aguirre era una correligionaria que introducía cada tres discursos uno con ‘boutades’ , igual le ha ocurrido en toda su trayectoria a Alfonso Guerra, inclusive con más gracejo este, pero la palabra castellana de cocido con oreja de esta hoy expresidenta ni dejaba, ni va a dejar indiferente a nadie, y no solo porque tuviera la vara de mando, el dedo acusador, y la firma autorizada, sino porque sus posicionamientos no eran exclusivamente tontos, ni por supuesto irreflexivos, sino fácilmente entendibles, oseasé claros, lo que a buena verdad falta entre los que mandan, y los que fiscalizan a los que mandan. A mi, verán, me caía incluso simpática, claro, ni sufro sus centros de enseñanza ni sus centros de salud o sus andenes, su salida de la escena va a bajar el ritmo cardiaco de la política de la villa y corte, por extensión de esto que llamamos España. Llegará la Pascua y retomará su días con familiares y amigos, y al nuevo año volverá a ser una tertuliana de primera, a hacer discurso político sin las virutas de un presupuesto. Tras oír su decisión he querido verla exhalando lágrimas y tambaleándose. La cuña opositura de su mismo madero, el que hace hoy un ridículo que le tacha en Justicia, ha tenido palabricas justas y ante el acoso de la legión que empuñaba micros y grabadoras no sólo ha tenido que decir ‘rompan filas’, sino que ha tenido que lanzar una ofensiva de manotazos. A esta sargento que se va, eso no le hubiera pasado nunca. Es una cuestión de pasta, y de cómo se va batiendo, con el tiempo, la pasta. Vendrán trasfondos como que es una comunidad arruinada la que deja, que los nuevos cambios que la ruina traerán acabarán quizá con esa administración autonómica en un lugar uniprovincial… miles cosas. Esperanza Aguirre se va pero se queda, ojo al parche.

miércoles, 8 de agosto de 2012

El bulervard de los sueños

Este artículo se iba a titular de otra manera, de mil maneras en nueve días que creo no escribo. Pero el asunto más certero era ‘planeamiento’ por el momento. Se escribe como se eructa, sacando parte de lo que se ha comido y aquella tarde me acordé de Machín, y hacía 35 años de la muerte de Machín, hoy quizá negramente olvidado, pero iba a escribir de eso cuando, chas dos días después de aquella efemérides (creo que el 4 de agosto) muere Chavela, la laureada y querida, que en su larga vida pudo haber caído en el olvido, pero no fue así. A Chavela la llevan como a Camarón pero con poncho, y a Machín -fui venerador a ver su mausoleo en el Cementerio de San Fernando- le echan los cubanos una botella de ron, ya no se si el día de su muerte o… no ha salido nada en la tele. Iba a empezar mi artículo de otra forma, hablando de que cerraban mi gimnasio, pero ya lo han cerrado, de que las empresas de salvamento llamadas ‘Iniciativas económicas…’ no han podido con una mala gestión heredada y una competencia desleal por parte de la administración pública. Iba a contarles que fui como última vez más que por hacer gimnasia, por ver las caras, y el semblante, y lo vi. Con el gimnasio pasa como con la herencia de primero de BUP: te encuentras por ahí a gente que conoces de allí, pero no les saludas, sólo les observas y te imaginas a dónde van, con quien van, qué piensan. El bueno de Sergio me trae a Sabina cantado por flamencos, con un retrato de carátula feísimo, recuerdo que a los comunistas les di el disco regalado de Serrat cantado también por flamencos. Los flamencos están estupendos, no bajan ni sus cachés y se deciden por homenajear. La forma, sin soporte me jode un tanto, de este último legado, Sabina por los flamencos, pero suena bien, tan bien que ahora mismo está sonando mientras escribo. Y mientras he ido escaneando y recortando fotos para un homenaje a la madre que me parió. Iba a empezar este artículo hace como seis días, y hubiera sido otro, la vida no nos moldea, nos lleva sin planteamiento fijo a los que no somos filósofos de veras, a los pintureros, a los canturreadores, a los que como yo tenemos cada día un corazón más caribeño que dice: guay, chan chan y toca la marimba, mientras el mundo conocido se va derrumbando. Ya lo comprobarán en el ‘Boomerang’ del ínclito Michael Lewis, del que no he querido ni hablarles. Pongan al rojo el rec o denle al intro. Giren sobre sí mismos en el comedor haciendo el tonto. Por la calle van los cara de amargaos buscando el muro de la rambla, ustedes si rompen la mitad del mobiliario, tendrán ruido de acompañamiento, y por lo menos algo que recoger al final de la fiesta. Feliz agosto.

viernes, 20 de julio de 2012

La canción del verano

‘Las penas y las barquitas/ se van por la misma senda/ las penas son de nosotros/ las barquitas son ajenas’. Voz de Chano Lobato, estilo quizá tango-rumba. Yo iba a paso ligero por la trama de calles seudopeatonales, en las puertas, las ocho y media pasadas, las señoras al fresco cosiendo unos bajos, haciendo ganchillo; mucho costurero. El pescador parado que fue un tiempo camarero y que anteayer pintaba una verja a una vecina estaba apostado hablando con su niña. Todos ausentes, distantes y distraídos de lo que había en el centro neurálgico de la ciudad, una manifa. El viejo cantautor vuelve a alentar a los hombres de las entrañas de la tierra. El se lo lleva crudo con los de la organización de cobrar derechos y su director, pero sigue sonando entre los hombres-cabreados por sus pérdidas ‘traigo la camisa roja/ de sangre de un compañero/…’ y el cantante de la tierra va, como el arriero va a la llamada de los hombres y la asociación de vecinos de un populoso barrio de Madrid que organizó el sarao de apoyo con los de la ceja, ¡como se echa de menos al de la ceja! El consejero abandonó la pancarta y se fue a la francesa, a su tierra que está a tiro de piedra, de donde en la Guerra Civil vinieron los hombres andando; la máxima dirigente le dijo “cuando quieras te vas”, y cuando yo pregunté por él, ya se había ido. Lo cual demuestra que yo no soy un máximo dirigente sino un buscador de oportunidad. Se coreó fuerte ‘hijos de puta’ siglas, frente a sede, los de dentro estaban en la playa, los de fuera haciendo número, hasta 25.000 han dicho los del diario que alentaban hasta hace dos meses al máximo dirigente de los de la sede. El periódico visto el panorama hoy, se ha actualizado y tirado el número por todo lo alto. Allí estábamos unos 10.000. Como alguna gente se fia de mi, me ponen bien por como escribo, por como aterrizo en lo concreto, me alaban ante los de la oportunidad de gobernar, me da un cierto rubor, pero se a qué se refiere, se lo remarco, si. Este no ha leído mi blog, solo lo que oficialmente meto en letra de molde, si no se iría horrorizado. Pienso: ‘volver, con la frente marchita/ las nieves del tiempo platearon tu sien’. Este y yo nos conocemos de hace tiempo e intercambiamos como hacer chanchullos legales. Nuestra conciencia de clase nos lo permite. El dirigente sindical es tonto del culo: “la policía que nos cuida” dijo así, sin anestesia. Más otras soflamas íntegras para la arenga de la función pública, si, lo importante, como me preguntó una vez más Loli Salvador es cuánta gente había, ya dije, y ya he dicho aquí 10.000 a la verdad. Pero al dirigente sindical y a la siempre-consulta le interesa eso “Con más gente a favor de gente/ en cada pueblo y nación…” Obviaron que mi compañero se encontró al liberado de correos tomando helados con su novia sudándole el nabo lo que allí pasaba, o que el hermano de mi exjefe enchufado en una empresa de la administración paralela estaba allí defendiendo su puesto de trabajo, regalado, con uñas y dientes. Al final los bares son quienes más tienen que agradecer que se hagan manifestaciones, lo dijo el cantante que ven en la foto de arriba, y es verdad. Tanto que el del bar clásico de El Parque había dado vacaciones a sus camareros y se vió desbordado ante la llegada de hombres y mujeres y niños que habían pasado calor sobre el asfalto. Entre ellos la dirigente entonces y compañera mía que hablaba de coeducación y de feminismo, que permitía a su hija cantar canciones de patio seudo-machistas y se levantó para traer a la mesa la silla donde su hombre sentara el culo. Pensé en ese momento acercarme y cantar “dónde estaba entonces/ cuando tanto…”. Me fui a otro bar pensando en la canción del verano y en la alegría del ‘que se jodan’… nuestra integridad física, y aquello por lo que luchamos, esto en lo que creemos, y a lo que de pronto nos apuntamos. Sobre los fundamentos, sobre eso me fuí pensando, pero el pensamiento me duró poco. La música está bien para dormir abrazados.

lunes, 9 de julio de 2012

Soberanía

De un soberano/ lloraba una cartagenera/ a los pies de un soberano/ Por Dios, y por la Santa Magdalena/ que no se lleven a mi hermano/ al Peñón de la Gomera. Sintonía, se canta por malagueñas, busquenlá. Mi amigo me habla bien de García-Margallo, ese ministro, con su trayectoria de eurodiputado hará que nos traten de otra forma en Europa, hay cosas que su grupo votó, y en asuntos exteriores todo va según los favores debidos. Quizá por eso nuestro préstamo que se sabrá al dedillo la letra pequeña el próximo día 9 es el que quisieran para si portugueses y griegos. Mi amigo desentraña que todos los ministros de asuntos exteriores han sido gente ya no sólo bien relacionada, sino que habían instrumentalizado antes favores-decisiones que se pueden facturar en cualquier otro momento, si no, no valdrían para el cargo, esto desde el fallecido Fernández-Ordóñez que fue de soe en los mediados ochenta. Asuntos Exteriores, viene este caso a poner sobre la mesa la soberanía de los pueblos, la itervención, la interactaución, la claudicación, y la entrega de las singularidades, de las particularidades, y en si las multas de la globalización. Un profesor también más amigo, dice que esto se soluciona, la crisis, con más Europa. El presidente de los empresarios andaluces en un curso de verano dice que esto que vivimos es una guerra entre monedas, sistemas monetarios. Uno se rie cuando pensaba “si quieren la independencia que pongan una frontera y se coman lo que producen” pensando en los vascos por ejemplo. Qué soberanía si nos imponen pagar por las recetas, qué políticas trasferidas, que insumisión, qué hecho diferencial, que idiosincrasia, y qué soberanía en suma sobre nuestros bienes comunes. Cuál es nuestra comunidad, cuál nuestra aldea, cuál nuestra idea de internacionalismo, cuál la inculturación… Qué distingo entre nuestra deuda, su porcentaje y el que pagan los alemanes por ejemplo. Qué diferenciación, qué singularidad, qué soberanía. Lleva razón el profesor: entregar y más Europa. Moriremos si nos quedamos con lo que tenemos? Lleva razón García-Margallo “vivimos en un mundo de soberanías compartidas”. Está bien que un decreto de estado quite las mancomunidades de municipios, quien debe decidir acabar con las Diputaciones, por qué no nos enseñan todo el organigrama y las supeditaciones de una administración a otra. Por qué no nos explicaron bien Maastrich, por qué no se relee ahora. Por qué los constitucionalistas que se juntan en mi barrio para redactar una constitución nueva, no empiezan por ver cuánto vale dentro de una Europa unida la que hay… Qué lio. De un soberano lloraba una cartagenera, la malagueña que postra de hinojos a la pobre en súplica, nos paga con nuestro analfabetismo, no ya de yesaires, sino de preciudadanos. De hipnóticos y de, no se ya ni qué pensar ni qué decir. Quiero soberanía consciente, quien manda en qué y para qué y hasta cuanto.

miércoles, 4 de julio de 2012

El jefe muerto

Mi tratamiento siempre fue de usted, para su ‘cabreillo’, desde el primer día en el que yo adolescente le eché cara al asunto y me presenté a pedir una oportunidad, hasta la última media mañana en que, en un ambiente osco en el gran despacho, me contó lo que yo ya sabía. Su destitución. Enrique Seijas fue mi jefe, el único jefe real, por oportunidad, autoridad y estima, oseasé: por grado. Desayuno enterándome de su muerte, y se me encuentran, a golpes, su perfume desenfadado sacando agua de la bombona invertida y preguntándome por algo de lo que el día llevaba entre manos. Quiero que se sepa que no hay, o había, espacio más vivo que una redacción de diario, incluso tan vivo como un zoco marroquí. Eso hasta que yo recuerdo, no se cómo son hoy las redacciones de diarios. A la hora de conocer a Enrique me dio la oportunidad verbalizada, lo que podía ser un cumplido, pero a los dos o tres días fui a comprobar el ofrecimiento y se hizo fehaciente, me puso a prueba y parece que la superé. Desde ese día, y hasta el de su marcha fue mi jefe, ya dije, mi único jefe, y pese a todas las rondas que fueron acechándole, circundándole y poniéndole en solfa, yo nunca me di por bien enterado, a sabiendas de que si, llevaría sus manejos. Una de las cosas que dan el grado de jefe son fundamentalmente las intrigas, y con ellas vivió al menos en los últimos dos años (de su mandato) y así se fueron, los de dentro, posicionando y desposicionando en sus lealtades, escuderías y traiciones, asuntos indispensables para una jefatura real. A mi él siempre me pareció el mismo: tan prismático. Me trató con cariño, amabilidad y condescendencia, y por ello esa cuestión paternal que siempre he asociado a los jefes. Lo constata la dedicatoria de su libro ‘Impulsos’ que ahora cojo para escanear la portada: ‘A mi buen amigo Luis García Yepes, al que tanto me une, rogándole (…) las ‘broncas’ cariñosas que le echo. Un Abrazo’. Siempre le traté de usted, desde el primer hasta el último día, incluso para su molestia, se lo merecía, en mi protocolo era y es el grado sumo. Fue un tiempo magnífico que compartimos con el y con muchos otros, fue en mi vida un tiempo clave. Lo último ocurrido, ha sido una sorpresa, una desagradable sorpresa. Descanse En Paz.

sábado, 30 de junio de 2012

A vueltas con el pasado

Que hagan huelga los trabajadores de la SER, una huelga preventiva, como dice el comunicado oficial de la empresa, que sitúa además que "dadas las circunstancias que concurren en el ámbito publicitario", vamos, que se van a quitar a unos cuantos de enmedio. Bueno, pues dado que la huelga retomó una programación ya antigua, de recortes, pude oír a Juan Cruz decir que el poeta Ángel González, al que me debo acercar más allá de la copla de Sabina, decía, volviendo a mi entrada de hace unos días que: "cada uno tenemos el pasado que no pensábamos haber tenido", me hizo pensar, mientras yo en huelga pintaba y oía una radio pasada. Después busqué algo más de González, sobre esto, al que le marcaba poeticamente el paso del tiempo,
y descubro estas declaraciones muy clarificantes, porque todos tendemos a engrandecer a veces unas mierdecillas: "el tiempo que yo echo de menos no mereció la pena para nada, fue un tiempo muy aburrido, muy espeso, muy tonto y, sin embargo, hay cierta nostalgia de aquella época". Lo que es la vida, Ángel González.

sábado, 23 de junio de 2012

Un obsequio por San Juan

Mi barrio bullía en esta tarde y esta noche. Los zagalones corriendo, yo esperando que viniera mi prima, para salir con mis padres, saludos, bar, después con la panda de mis hermanos, más tarde, a otros lares con los primeros amigos. Más allá a la organización del colectivo, entre tanto a encuentros fortuitos, a salir, a bajar. La noche de San Juan es siempre una complicación de planes que está muy fácil, y muy bien par a los muy jóvenes, o para los muy asentados Entre tanto es un no saber qué, cómo, con quién. Esta noche me voy al Levante como hace años. Os dejo un obsequio, buscaba otro, pero no lo encuentro, este quizá ya se paró alguna vez por aquí, pero viene ala punto. Feliz Noche. A poniente huye silbante el viento, en la arena queda un rastro de pértiga, el fuego en extinción te envía una señal de cierre de episodio. Comienzan su danza las tártaras violetas, los chamanes negros y el níquel de las navajas.

sábado, 16 de junio de 2012

Gestionar el pasado

Cuando le anuncié quién era y el cargo que ya ostentaba contestó “ah si, aquella gorda que era cocainómana”, y me dejó de piedra, sobre esos particulares yo había pensado, y también los sabía pero le había visto varias veces después, había abandonado aquello, y asentado quizá la cabeza y… el amigo de la frase le perdió la pista y mantenía en su recuerdo aquello, parte del pasado de aquella. Getionar nuestro pasado no es tan fácil como los que hablan ahora “tuneas un poco el currículum y para adelante”, gestionar nuestro pasado es hacer la relectura de todos aquellos falangistas que se hicieron socialistas cuando este partido estaba en las puertas del cambio y habían sido lo otro por que era lo que tocaba, lo que había, más palmarios fueron en aquellos años los currículus de intelectuales y profesores de universidad, que hoy no se si son lo mismo. Bueno, venía a decir que gestionar nuestro pasado en una existencia poliédrica no es tan fácil como meter unas palabrejas con calzador en un textillo, es decir quiénes somos y cómo hemos ido cambiando, esto, siempre y si, con los que con nosotros van es fácil, lo gestionan ellos, pero con los que tienen lapsus, impases de tiempo no lo es tanto. Gestionar nuestro pasado me parece estúpido que sea una preocupación de gentes leales y formadas, es más bien un asunto de débiles y torticeros. El pasado es pasado, pero nos persigue si, y nos ha dado el hoy, pero a todos cuando toca la moral filtra fácil, como el agua y enturbia. Yo estaba durmiendo cuando me despertó por teléfono un hombre del pasado, para un nada concreto y que gracias a eso me trajo al presente, era la hora de la conferencia de Alberto Garzón, el economista joven, vívido, ilusionista, el jovencísimo diputado pasadoo del 15M al congreso, y me fui a verlo: habló del pasado, de la evolución de Europa, de cómo se formó la Burbuja, de la rémora de la izquierda, dijo que la bici del capitalismo estaba parada y caída y que cuando se ponga en marcha tampoco nadie sabe dónde irá, que el trabajo es el de siempre, conciencia lecturas.... Tenemos la rémora del pasado a este nivel global o suprahumano, la rémora que también llevamos personalmente: ‘la que tomaba cocaína’. Es fastuoso más que grande hacer ver a los demás lo que queremos que vean de nosotros, orientarles y dirigirles para que vayan por ahí dando la imagen de nosotros que nos interesa, pero no es tan fácil, si eso fuera así yo sería rico. Nuestras acciones, nuestro día a día, la forma de entender del otro, su pasado también, les rebota nuestra imagen, nuestra persona (palabra que viene de máscara). El hombre que recordaba así a la mujer que ostenta el puesto ha traído a este mundo una criatura a la que tendrá que explicar, porque así lo mandan los cánones, un pasado que esa criatura apenas ha vivido y tan siquiera tiene, todo por la huella corporal, física, de esta criatura. Habrá de inventarse un pasado cohabitable con el que tristemente hay escrito en los papeles que algún policía o agente de lo que sea habrá inventado en su país de origen. A veces nos preocupa nuestra mala conciencia, a la que el malo de Pérez Reverte le dedicaba un buen artículo no hace tanto, esta sólo se quita con la buena conciencia, como yo estoy ahora, con ganas de escribir, pintar y follar, el problema es que me preocupa el futuro, y eso no me deja pararme en esto que les he dicho que me gusta, así que el tiempo que tengo no lo echo en leer a la hija de Punset, que si, se llama Elsa pero no me interesa, ese es su pasado: la hija de Punset, que lo gestione como le de la gana. Si no les preocupa el futuro, y si creen que controlan su pasado, cómprense el nuevo libreto que la susodicha ha escrito y ha puesto a la venta. Si han llegado leyendo hasta aquí, ustedes perdonen, este artículo se ha escrito sólo para pasar el rato, bórrenlo de su memoria, y de mi currículo. Buenas tardes.

viernes, 8 de junio de 2012

El Acabóse

He llamado para que se remate de veras y bien, se devuelvan las llaves y se despidan de quienes nos acogieron más bien, bien, en su sede. Cierra ya la asociación de la que fui promotor y de la que a la postre he renegado hace casi un año como socio. Podría glosar miles de cosas pero voy solamente a determinar lo que dio de si una idea que allá por mayo de 2004 vio la luz el día que se casaba el Príncipe de España, y que se configuró hasta el primer medio año como algo lleno de de esperanza e innovación, donde saltó al poco el primer despropósito, a los tres años un siguiente, y se arrastró medianamente clara su postura y apuesta hasta un último año en que la desidia se apoderó del colectivo, y de a poco verse, planificar y creerse, a defenecido no aún sin tener que finiquitar los haberes en prebendas para los miembros, sin ton ni son, a mi entender. La Asociación muere por inanición, han sido cosas, no problemas que ya los hubo en su tiempo, los que han devenido en la desgana, la desidia, por una cuestión simplemente de creencia. Funciona aquello en lo que la gente cree, y la forma de creer siempre se ha evidenciado en asuntos tales como ilusión, dedicación de tiempo e inversión de dinero. Si todo eso se ha ido despilfarrando, primero por falta de disciplina y más allá por falta de ideas, y después de eso por creencia, estaba cantado lo innecesario de la existencia. Con todo, el colectivo sirvió en casi toda su vida para tres cosas, una muy importatne la divulgación histórica, patrimonial y creativa de dentro y en los confines de la provincia, de otra para mantener ciertas tradiciones y de una tercera para ofrecer pequeños espectáculos y fiestecillas. Alguna parte singular creo que mantuvo en el fondo, y en las formas, de presentar; sin demasiada difusión, no llegó nunca a ser una gran organización en su ámbito, ni en su especialidad, pero logró llevar a muchas personas, acaso 200, por primera vez ante eventos, experiencias y hechos etnográficos o culturales que por otra vía no le hubieran llegado a las cercanías nunca, esto lo afirmo en redondo. Nació, cuando una señera organización, el Ateneo, cerraba por luchas internas, nació también a la par que la asociación de amigos del mayor castillo de la provincia, y que un colectivo de jóvenes con discapacidad creyentes en la creatividad. Estas dos últimas perviven, por distintos motivos, uno y claro por su especificidad, lo que aquesta que nos ocupa no tuvo, y también quizá por la formación e intereses de los que las forman, dirigen y mantienen. Uno no puede descargarse quizá de no haber influido e insistido suficientemente en la formación, en la apreciación, pero vivimos en una época de utilitarismo y servicio, que si, muchos de los que fueron llegando lo traían implícito y ni esperaban, ni querían otra cosa, y así han acabado con ese tufo las últimas actividades. Muere pues algo que al nacer venía de la mano de la autofinanciación, la expectativa y el todos los públicos y que ha terminado quemando lo que había en las arcas porque era una complicación dejárselo a otros que quisieran hacer cosas y que han demostrado su solvencia. La vida es así de irónica, pero uno ni podía dar lecciones sin volver a complicarse, lo que se llama exigir sin exponer. Se va con el viento algo que tuvo su vigor, su vigencia, sus dilemas, sus conflictos, sus alegrías, sus expectativas y sus quebraderos de cabeza y sus hechos fehacientes también. La gente no está para pensar, para complicarse, uno tampoco. Acabóse, si todo en la vida es así, pero sin melancolía baladí conforme acaba todo parece más feo. Vienen otros, si, quizá con otro son, acaso con otro método, quizá con el mismo fin. Morir tiene sentido cuando se ha acabado el proyecto, y los proyectos si, los llevan a cabo las personas vivas. DEP.

lunes, 21 de mayo de 2012

La maldad

El estupendo periodista, izquierdo-socialista, Miguel Ángel Aguilar, que sigue en mi ideario como algunos otros, saben que también algunos otros que se fueron al lado marrón, derecho-socarrón; dice Miguel Ángle Aguilar desde el último año y repetidamente lo de “no hay venenos, sino dosis”, igual que su homónimo y de corte parecido José María Izquierdo, al que también quiero, pero admiro menos, habla de ‘catavenenos’. Bien, de venenos voy a hablarles, de renuncios de evidencias, de maldades en las que uno entra consciente o por omisión, idem, que da igual quiero decir. Ser de izq o der las personas, no incentiva, ni elude el asunto en general, pues la maldad y la vanidad, y la insidia existe en la condición humana. Al grano. Cuando la organización funcionaba, y hacía cosas continuas y de distinto corte, tuvimos a bien hacer un espectáculo en una sede prestada, la mujer que nos pusieron de responsable de los prestamistas se las tuvo que ver con Antonio, un compi en aquel entonces activo, comprometido y creyente. Antonio, me decía a mi, que no estaba involucrado en la organización previa, que la señora se metía unos taponazos para verla, se le encendieron los ojitos cuando llegaron los barriles de cerveza, Antonio, que tampoco es abstemio, le ofreció y lo pasaron bien, percibió aquello en la señora eminentemente borracha. De la señora supe al poco, al verla que ayudó a un ‘sobrino’ supongo a salir de la droga, que era realmente entregada, un tic raro. La señora que se limitó a abrir y cerrar el local de espectáculos y a llenar su buche, llegó hace poco a la sede de otra organización que se está fundando en mis cercanías, llegó con un concierto empezado, a poner sobre-aviso que los vecinos quizá se sintieran molestos por el ruido, que aquello qué era, que lo lógico es que hubieran puesto en conocimiento… pla pla pla, y entre mis conocidos, estaba uno al que le dije: “invitalá a un taponazo y se acabó la monserga”. La pasada semana, cuando iba casa de unos amigos a visitarles antes de en mi gimnasio intentar que no me entraran agujetas en la barrigota, buscando aparcamiento, mirando a la derecha, en la puerta de ARA (Alcohólicos Rehabilitados de Almería), fumando un cigarro con otros hombres en terapia me encontré a la señora de los locales de música que yo sabía como callar sus ansias y su boca, su preocupación fingida. La historia no tiene más moraleja, no esperen después de esto una encíclica.

viernes, 4 de mayo de 2012

M de esperanza y desencanto

Al poco de enterarme fui a la plaza. Vi en internet el vídeo de la tarde donde se desplegó, con el empuje de los hombres y la fuerza del viento, la pancarta: ‘No somos mercancía en manos de políticos y banqueros’. Aquello formó el quince eme y la acampada. Era mi ciudad, era insólito. Empecé a ver lo de Madrid. Hace apenas un año, osea, no hace un año. Nos queda lejos, parece. En unos meses ha llegado a mi casa, a mi lecho un partícipe algo tardío, un mantenedor en pie de aquello. Cuando empezó aquel asunto que aún en él sigue vivo, fui dos o tres veces, me impliqué en ver un video, escuché en tres asambleas, aporté rotus, cajas, bolis... asistí a dos manifas. Compartía cosas, pero no sabía a dónde iba, todo parecía un ejemplo, se exportó, estalló la primavera árabe… Ya saben con qué acabó, qué empezó, cómo cambió, a qué dio lugar, o nada de eso… dos elecciones entre tanto aquí, en nuestro territorio, y el resultado, ya saben. Lo que dijo la monja de la que hablaré más, un tanto más abajo: “las ideas fascistas se están legislando y aplicando a nuestras vidas”. Llegado este mayo, osea ayer, me convocan a la prefundación de un partido, para lo que viene a hablar un poeta, un poeta que con poesía presenta todo, y dice esencialmente que hay que constituir una mayoría social de izquierdas, integrarla en Izquierda Unida, y luchar contra la derecha cultural que ha mandado siempre desde la transición en España; capítulo que por otra parte hay que desterrar ya: se acabó la transición. Habla muchas cosas más, pero los mentores, como queda claro, vienen de otros lados, rebotados, con sus mochilas llenas como también quedó dicho. La cuestión es llenas de qué. El encuentro aún con cautelas, aún con recelos, aún con medias ganas, me abrió un espacio de participación, y escuché sensatamente a gentes como la monja ante-nombrada, y el profesor joven padre tardío que dio en la diana: “ninguna organización está de acuerdo conmigo”, y con eso, y con su sorna, se ofreció para poner en marcha el nuevo partido. Después de tanto pronunciarme verbalmente con los realmente cercanos sobre el trabajo por hacer, sobre la implicación, sobre la participación, sobre tener dónde vertebrar el pensamiento; pese a enardecerme en esa reunión de este mayo de ayer diciendo que si, los que allí estábamos éramos como situó el poeta al inicio: ‘unos pequeño burgueses izquierdosos y urbanitas’, echando en falta cómo, dónde llegar a los obreros (con mis dudas sobre la clase obrera, y entendiendo que el albañil de mi bar, de mi edad dice, que ‘tengo que ir al cursillo a la ugt esa’), decía que después de dar tantas vueltas entre amigos y copas y cumpleaños y tardes de playa voy a darme una oportunidad de tanta eme, que no es la del exmiembro de Pereza que tanto le gusta al que yace en mi lecho, y voy a participar con eme de MIMPLICO, no se si fundando este nuevo partido de poetas o en ese otro partido que ya existía, y al que aún apoyando siempre, miraba a veces con recelos, otras con cautelas y algunas otras con medias ganas. En la asamblea, los que menos hablaban y quizá menos pintaban, dieron en la clave: La monja “las ideas fascistas las están haciendo leyes para nosotros” y el joven profesor padre tardío: “ninguna organización está de acuerdo conmigo”. Esperanza y Desencanto, eme, no más mayos, la copla del joven dice “M cuando se ponga el sol voy a despedirme” el refundado Perales, que también está en mi ideario hoy, decía antaño “que pasará mañana si no estoy”. Siempre tuvimos nuestras cautelas, nuestros recelos, nuestras medias ganas, quizá miedo de nosotros mismos, siempre estuvimos yéndonos y no llegamos nunca. Las canciones siempre fueron de amor, las monjas y los maestros, inclusive los poetas, a veces te quitan la pereza, junto a los cantantes. Aún y con todo no lo olvido, estamos hablando de política que hoy es consustancial, y no un aderezo. Seguid con salud.

miércoles, 18 de abril de 2012

Suntuosidad


A la hora que Juan Carlos de Borbón y Borbón abandonaba la clínica, en un lugar de Sevilla se subastaban los enseres, mobiliario y adornos del Hotel Alfonso XIII de la ciudad.
El hombre que salía de la convalecencia pedía disculpas y aventuraba que no lo volvería a hacer más una cosa así. Un viejito llevado por su gusto a las cosas decimonónicas llegó a los noventa euros por una pieza que salió por quince (un aplique con tres lámparas y lágrimas de cristal) pero se arrepintió en el segundo siguiente. La pieza quedó en 85 euros, el precio anterior, y para otro pujador
El hombre con los dos apellidos iguales hablaba a los medios estatales que tiene el Gobierno, con cara hinchona y gesto osco. Los subasteros salieron con caras felices por la pieza del gran establecimiento donde pasaron la noche de bodas, quedaron para un café con un representante, o simplemente les pensaron que era un honor poseer una piececita, un cacho de una ciudad que siembra honores.
Los jardines de palacio, que se cantan por rumbas, tienen el aprecio de los villanos y de los cortesanos, y de la aristocracia, por su belleza, hablar de esto es salirse del guión de la mala suerte y de la fealdad que nos recetan, es una provocación, por eso unos cualquieras han ido a por un anaquel, una repisilla, una lámpara o una alfombra, aunque raída, por tradición y querencia, por suntuosidad, por lujo y entrada en otro olvido. No había ni un anticuario entre los subasteros.
El hotel con el nombre del abuelo del hombre que se ha partido la cadera (¿partida?) lo inauguró el susodicho un 28 de abril de 1929, con motivo de la Expo Iberoamericana de aquella ciudad. Dos años después menos catorce días, se decretaba la república y este hombre abandonaba España. El hotel siguió con otro nombre Andalucía Palace, y los mismos muebles. Por cierto, un hotel de propiedad municipal. Por hoy se profanaba un exorno que fue sustituido por la empresa concesionaria hace un mes.
El hombre con la cadera casi recuperada, de oficio Rey, se disculpaba con un terno desigual, en una salita de un hospital de Madrid, ante los medios oficiales TVE y EFE. Se disculpaba por lo que habían dicho, no por lo que había hecho, ni tan siquiera por lo que le había sucedido.
La suntuosidad y el glamour son cosas verdaderamente afrancesadas, no responden a equívocos, ni a circunstancias sobrevenidas, ni a remiendos. Se tienen y están, hasta el final, hasta el fin de los días. Son Inherentes, no están al baile de las circunstancias, ni por supuesto de las noticias.
Un león herido puede ser fiero y defensivo, incluso sedado: dócil, pero nunca un león en un escudo de armas, como el que tiene uno de mis apellidos. Una casa solariega y blasonada se puede redecorar y hacer por ejemplo en su interior un Spa , pero el representante de una máxima institución de inspiración divina, por algo que le ocurre a él mismo, en circunstancias adversas dentro de un festín de su condición, lo último que tiene que hacer es adolecer debilidad. Es una cuestión simplemente estúpida, que a fin de cuentas, le deja indefenso, y por supuesto sin autoridad, simplemente ridículo y a la par, desautorizado. Toda monarquía es absolutista.
Un vendedor de muebles de mi ciudad, una vez al año, iba a un safari, que es como se llaman estas cacerías, en las que Borbón y Borbón se ha roto la cadera. Me pareció horroroso y me dejó estupefacto. En este otro hombre que nos ocupa, sinceramente, no; me han dejado así su cara, y su traje, y el contexto también, la sala de hospital. El resto, lo que ha dicho, ya queda reflejado unos párrafos atrás.

sábado, 31 de marzo de 2012

Mofa bufa


De todas las definiciones que fui adquiriendo, la más detestable es esta: ‘La política es el arte de lo posible’. Lo cual no la invalida.
Me da risa, a día de hoy ver a los que escribieron ‘PPSOE’ y a los que gritaron ‘PSOE, PP, la misma mierda es’ alegrarse del más que posible pacto de Andalucía. Si, me da náuseas. Los caminos de la condición humana son así de torticeros, y no logro a alcanzar por qué, si estos son no adscritos a ninguna formación, tienen que vivir con la esperanza del reino de los cielos, avenirse a lo posible después de, al menos teóricamente, haberlo detestado.
Vistos hoy, después de sus arengas, son solamente una carcamonía que se atiene al ‘arte de lo posible’, cuando parecían el paradigma del nuevomundo. Una última aclaración, que deteste las cosas no quiere decir que las cosas no sean como son, si, la política de la gobernanza es el arte de lo posible, otra cuestión es la filosofía política, y los no adscritos, yo no lo soy, pero jamás dije semejante cosa, no pueden hacer este ridículo espantoso de cuentas sobre un cuaderno de ‘Rubio’ para justificar lo que les parece menos malo porque su arenga a la contra era nada más y nada menos que eso: ‘filosofíapolítica’. Nunca hubo nada más despreciable que ser: Un miembro del coro de la cárcel, osea, el bufón de la corte.

lunes, 26 de marzo de 2012

Pan para hoy


Me alegra el resultado de Andalucía. Nada más.
El otro día se celebraba el día de la poesía, el pasado día veintitrés, tenemos tantos días de tantas cosas que esto es aborrecible, menos dos días que para mi sitúan el cumple de dos amigos. El resto, pues vale, quedan desautorizados por ser cada día el día algo, lo que me puede valer para mi trabajo.
Bien, el día de la poesía estaba yo friendo pescao, la tele al fondo, cuando hago esto escucho la tele y miro la hornilla, y entre tanto, discúlpenme no situar que poetisa, esta dijo lo siguiente: “la poesía, como el arte en general, sirve para olvidarse de lo que vamos a comer mañana”.
Así que el 25 de marzo este, como quien no quiere la cosa, me lo pasé haciendo poesía en un colegio electoral por imperativo legal, ya avisé. Y me salieron los versos derechos. A primerísima hora llegaron los pic-nic’s del PP en cajas algo más que una de zapatos para cada interventor, apoderado y allegado, y los del SOE en bolsas arrugaitas. Después llegaron los políticos del PP, alcalde y concejales, diputado nacional y otros concejales: 9.15 primera visita y 12.30 segunda.
Allí estábamos todos como firmes, pero poco a poco se rompió el hielo y nos fuimos contando cosillas. Los viejos madrugan, los jóvenes, los que han dado el achuchón al PSOE, lo hicieron de tarde. Mi mesa no daría ni la uña de un diputado: 200 votos de 491 votantes.
Entre recesos me encuentro con un interventor socialista, viejo conocido, que tuvo una empresa, una peculiar empresa que se dedicaba a la repostería y tenía casi, o sin casi, a media plantilla de disminuidos, caso raro, a su vez era un cargo cofrade, y había obtenido subvenciones para aquella factoría del desayuno. Me cuadró todo, amable y confiado me contó el devenir de aquello y dos perlitas de la mayor factoría de pollos de aquesta provincia, que ha descapitalizado para dar suspensión de pagos, idem que los mayores vendedores de vehículos de todas clases, ínclita familia a la que se le están muriendo los viejos, que ha hecho lo propio, primero ERE, después suspensión, y el dinerito a otra parte. De su fortuna de hace una década me cuenta el engaño de sus socios, su recolocación en una organización que representa a aquel 50% de la plantilla, y su devenir posterior, hoy bien colocado. Fue, con todo, una sorpresa verle de interventor socialista.
En mi mesita, hay un joven capillita total, estilo sevillano, gracioso, del PP aunque sus padres son de IU y PSOE, alienta al partido de la mayoría de votos porque cree en lo privado y no entiende que los ricos tengan que pagar más, estudia ciencias políticas, pero ve difícil su carrera, quiere ser empresario de eventos, márqueting…. Lleno de vida y esperanza, con una pluma torcida, me cae requetebién, y con él, con sus veinte años, y su desparpajo, hicimos muy llevadera la jornada para todos. Se reía de los viejos de los suyos, se tomaba con relajo su trabajo. Llegará quizá a hacer dinero de lo suyo si le viene ayudita de Europa, qué he dicho, si le mantienen los descuentos de esta Reforma.
Me vine a comer a mi casa y me pasé media hora, como la que había salido antes, y como se lo tomó así de bien el presidente cuando se fue detrás de mí. A la vuelta, el viejo del que se reía un tanto el joven aprendiz de empresario, chófer de los gobernadores civiles franquistas, se llevaba la cajita del pic-nic que le correspondía y no comió, y a la vuelta de su casa le trajo un pestiño al joven de la pluma torcida y la risa puesta. Paradigma del día, el pestiño.
Al recuento, una socialista casi recién llegada tuvo un atranquito conmigo por si se daba nula o no una papeleta del PP. El Psoe quería a última hora hacer una cencerrada en los campos para espantar las gaviotas cuando sus cargos públicos madrugaron y comieron tarde para estar de cuerpo presente en los colegios, como manda en quienes se juegan algo en el lugar de los hechos.
Acabamos antes de la hora normal de una cena. Al ir a llevar las actas y ver que los chavalillos de otra mesa encontraron como respuesta en Los Nacionales que ellos no les podían llevar en su coche, pero sí custodiar el taxi que cogieran, ofrecí mi vehículo para todos, a la vuelta, e interactuando con un chavalillo avistado en el barrio, que este si, tenía la pluma derecha a sus veinte pocos, le quise alegrar después de lo pasado con, un bueno, ¿pero los sesenta eurillos no han estado nada mal, no?. Contestación: “Sesenta euros por estar todo el día ahí, con eso yo me limpio el culo”.
A día de hoy tenemos las necesidades básicas cubiertas, comer, reir, cagar, la jornada no fue de arte, tampoco es eso, no sirvió para ‘olvidarnos de lo que vamos a comer mañana', pero a los que estábamos allí, nos salió con los renglones derechos. Y mañana era hoy, donde se empieza a amasar el pan que, no se lo pierdan, estará para servirse el 19 de abril de 2011, ochenta años y cinco días después de decretarse la II República, no se hagan ningunas ilusiones. Lo que les toque del pan ya cocinado, recójanlo y una vez en su mano dos posibilidades: se lo llevan a la boca, o se limpian el culo, según lo sobrados o necesitados que ustedes estén.

miércoles, 14 de marzo de 2012

La papeleta

El Ayuntamiento de Almería trabaja con Uni-post, lo sabía pero no me acordaba, el muchacho de Uni-post toca a mi puerta a las 15.30 apenas intentaba coger el sueño. Abro la persiana, ola usted mismo, le traigo la convocatoria para la mesa electoral. ¿Cómo?, si, lo que está pensando.
No tengo ninguna emoción, me ha explicado, el chaval que es del barrio, que uno tiene que tener una buena excusa para faltar y que te lo tomen en cuenta, hay siete días para alegaciones, no voy a alegar nada, pero tampoco me hace ninguna ilusión estar allí de vocal segundo. Somos tres los responsables dice el libreto, siempre tenemos que estar dos, yo fumo, quiero comer en mi casa y encima no pone que te den ni una gorda.
Intentaré no ser un descreído total, pero la ‘fiesta de la democracia’ y todas esas zarandajas de políticos a por sus votos, me jode que me planifiquen un domingo. Entiendo que deben estar ciudadanos cuales quiera, no sólo la jauría de interventores y apoderados, pero me hace casi tan poca ilusión como si me llaman para un jurado popular, en el que ya, dicho sea de paso, no creo.
Pero me ha tocado, y tendré que ir allí, aprovechar para ver las caras de las viejecitas, los gestos de los jovencitos (si es que van), la patraña de los interventores, la edad del presidente de mesa, y entre hora y hora, tras el pacto de cómo nos vamos saliendo a la puerta a ver el aburrimiento de los policías, trabar alguna cosa interesante, si la suegra de uno tiene un terreno barato para vender, si en aquel café han puesto eso, café y tostada por 1.25€, si el equipo de la ciudad ha jugado en casa, si los del PlanUrban, donde vamos a estar no saben ni lo que tienen entre manos.
Total, la fiesta esta de la democracia, tiene menos emoción que Doña Rogelia mirando por la ventana de La Parrala. Añoro, sin apenas haberlo vivido, los años de emoción, por entrar en la OTAN, por los pactos de la Moncloa, por las pre comunidades, por la política real.
Por cierto tiene que haber papeletas de todos los partidos, y supongo nos pondrán en antecedentes, se de pequeños-raros que el tabernero del volver de la taberna a la que voy se presenta por CDL, también he visto carteles de unos regionalistas de Andalucía Oriental, pero no conozco las 27 creo que se presenta, alguien las sabrá.
Voy, queda dicho, como creo que van a ir muchos sólo unos instantes, así como apretados por la micción masculina en una esquina, como la que pide guarecida tras la puerta, a su novio, que le alargue un clínex de la guantera del coche para limpiarse el chocho.
Tras mi sorpresa, incluso deslumbramiento inicial, me he puesto a leer unos instantes el libreto que se llama ‘Elecciones al Parlamento de Andalucía 2012, Manual para los miembros de las mesas electorales’ he conciliado el sueño como si tal cosa. El repartidor de Uni-post, aún siendo del barrio no se va a hacer visto allí porque está empadronado en casa de su hermana. Creo que habrá interventores conocidos mios, votaré al final, a lo mejor hago un desempate, a lo mejor encuentro un cortijo barato, quizá llega un lotero y me da la suerte, a lo mejor resulta que pagan algo por la jornada. La emoción es incesante. Hay que adelantar los relojes, a las dos, las tres, lo pone en todas partes de la documentación entregado, iré con la misma emoción que iría a sellar el paro, ustedes comprendan.

miércoles, 29 de febrero de 2012

Papel Pautado


Desdeñé el bonito blog de notas. Llevaba el papel pautado. Rayado de lado a lado. Se lo habrá regalado quizá otro, preferí el no.
La introducción no tiene nada que ver con el resto, tiene que ver con la justificación del titular. La manifestación ha sido aburrida, y eso que me he metido con los de izquierda unida. Pitos de los chinos que vibran bien, arenga frente al PP.
El ambiente no está para huelga general por mucho que hayan gritado los secretarios provinciales. Se convocará, si dios no lo remedia, el próximo 29 de marzo.
La gente iba allí porque le están jodiendo la marrana, los jodidos no estaban. En mi tierra un grupito de negrillos recién llegados bajo las banderas de CCOO. Nada de presencia respecto a una manifa de hace cuatro años.
El resto silente, la ocurrencia de Mariola con dos amigos, bajo signo de UGT de hacer como un rosario con las medidas de la nueva reforma retruécano ¡ora pronovis!, genial. Me dicen que muy animada la cola, presupongo estudiantes, 15M, quizá CNT.
Lo que les iba decir después del análisis somero. Domesticación. En el bar un amigo de derechas, subterránea derecha me echa por tierra esto porque no se lo hicieron al de antes. Porque espera a que llegue el de después, en suma, porque justifica a los de ahora. Este se libera en el bar entre vino de Alcolea, muy bueno.
Sí, los liberados sindicales no quieren perder su posición, si. Las trabajadoras del sindicato quieren que aquello sea un éxito de gente como si se hubieran tomado un tripi, los secretarios provinciales convocan a otra cosa el día 11 a lo que no le hago caso. Los alcaldes sociatas que han perdido, van bajo la bandera de UGT, si, todo eso es verdad, pero la reforma es un hecho impepinable . IU corea frente a todos los otros “PSOE-PP la misma mierda es”. El joven de derecha soterrada no lleva razón por una sencilla razón, solo sabe criticar, no está dispuesto a hacer nada. Bastante tiene, pero los que iban, los que íbamos, lo hacíamos absolutamente domesticados, que es el peor de los estados del hombre, cual perros, cual tortugas, cual agaponis. El ambiente no está para huelga general, pero si dios no lo remedia el 29 de marzo, unos días después de las andaluzas, unos días antes del jueves santo.
Sin crisis vivíamos mejor. Estábamos dentro del renglón y no se notaba.
Maldigo al politólogo de eco-izquierda: “cuanto peor, mejor”; maldigo la justificación del marxismo y maldigo también la domesticación de los hombres. Me cago en mi putamadre por necios, por pobres de mente y por amoldados, por lentejeros y asquerosos. Si hubiera huelga que sea un éxito, ah y no llevando razón el seudoderechista, a los nefastos compañeros hay que degollarlos entre las paredes de la organización, en silencio; a los enemigos a tiros por las calles. No se asusten, Dios también escribió renglones torcidos, cuando inventó todo esto era eso: un invento, no un modelo a seguir. Queremos joder con diplomacia, anda y que nos jodan.

lunes, 13 de febrero de 2012

ACATAR

No me voy a Katar, voy a hablarles de lo que creo. Tenemos que acatar la sentencia dictada por jurado popular que absuelve a Francisco Camps, y tenemos que hacer lo mismo con la que inculpa colegiadamente unanimidad en el Supremo a Baltasar Garzón.
Estos dos asuntos ponen sobre la mesa la idoneidad de los jurados populares para según qué casos, o para todos los casos, y la politización de la justicia respectivamente. Si, es así, quién había dicho que esto era perfecto, quién había creído que estábamos en lo cierto.
Que Grecia e Italia tengan a dos tecnócratas de presidentes del Gobierno, nombrados por sus parlamentos, elegidos por el pueblo, a instancias de órganos de representación supranacionales, puso en el punto de mira a un amigo que me dijo ‘que haya tecnócratas en circunstancias excepcionales no está tan mal’, y a un conocido nada sospechoso de retrógrado, ni conservador (por su trayectoria) en la idea de que ‘los tecnócratas están bien’. No lo comparto, pero entiendo que esos pueblos tienen que acatar la voluntad de sus parlamentos.
Quien sale elegido para un cargo en unas listas, tiene que acatar las orientaciones de su formación, desestimo, tras una conversación con otro amigo, lo que venía rondándome: las listas abiertas pueden llamarse más democráticas, pueden dar lugar más fácilmente a engaños y veleidades personalistas. No estoy de acuerdo con ellas.
Lo que el PSOE de Sevilla ha hecho tras el congreso nacional ha sido joder la marrana. Los intereses muestran que importan más cada uno que el partido, osea: cada facción. Esto los demócratas lo tenemos que valorar así. Los partidos con historia tienen sus facciones, que si, vienen de faccioso, lo cual viene de cara, o sea de personalismo, es decir, de grupito. El partido no tiene más que acatar o abrir expedientes de expulsión.
Si creo en las organizaciones, quizá en parcelas pequeñas, es por su función de reflexión, postura, acción y quiere decirse que lo que se decide-aprueba, se defiende.
A mi, por ejemplo en un organismo me dieron trabajos durante un tiempo sin compromiso firmado, se fueron los que había y los que llegaron no quieren saldar una cuenta pendiente. Por las normas-formas que aquellos llevaron, quiere decirse que tengo que acatar lo que aquestos ven o fundamentan para joder a aquellos y a mi. No hay más vuelta, como no pertenezco a ninguno tengo mi derecho a defender lo mío a sabiendas que puedo no llegar a ningún lado.
No creo, y esto lo digo en serio, el resto supongo que también, en la versatilidad de las decisiones, las decisiones son decisiones y se acabó. Valen para el tiempo que tras engendrarlas les demos de vida y en estas cuestiones político-sociales-judiciales tendremos, si nos implicamos, que tener seriedad, rigor y pundonor. Yo no estoy de acuerdo en casi nada con el Papa, pero si todo es relativismo, todo es reversible, no vamos a ningún puto sitio. Los dogmas convenidos son una cosa, y los intereses particulares otra.
PD: Ha sido muy llamativo para mi que en la huelga de los empleados de Iberia hubiera una pancarta de la CNT.

domingo, 5 de febrero de 2012

El Artisteo


La Tomate interpretaba a Paco España. Así le conocí, aquello era un zarandeo de caricatura y sonaja. Años ah mi padre me llevó a ver a El Titi al Teatro Lido, una cosa que no era para niños, pero mi padre no distinguía mucho eso.
El artisteo se deja llegar y se deja ver. El artisteo va de gañote de aquí estoy yo y de miramé. El Facebook ha hecho mucho por su sensación y por su creencia.
Soplar en la polla es malo y Bigote Arrocet dejó de existir para las calles del ferial, cuando le hizo una cucamona del Un Dos Tres a mi hermana, y le reconoció, y le regaló por tanto la bolsa de garrapiñadas que debería haber pagado.
Ir de artistas es una cuestión altivez de jardín de palacio en medio de churretes y peste a güisqui. Ser artista es que Lola Flores te regale su bata de cola, lo que hizo con el Paco España al que La Tomate intentaba interpretar.
Los del artisteo mueren muchas veces mal, y los artistas a veces también, y los mortales no andamos muy lejos de eso. Yo no huyo de los artistas si me rio con ellos, me dan un repullo los pies o ganas de comérmelos. Si llevan divinidad, rostro y piden mucha bebida haciéndose los suecos, mejor es retirarlos de tu territorio. Una vez, quizá dos es, permisible, el resto: cada uno que apechugue con sus vicios.
Los golfos si, todos acogidos en nuestra gran casa, pero que no vayan de artistas por dios, osea de artistas que saben hacer algo. Que sean golfos y punto. Con ellos no irán vida ni expectativas, irá la gracia del momento compartido, el saberte el guión, así como por casualidad.

viernes, 20 de enero de 2012

El repertorio



Me vienen de la cabeza a la voz. Alguna otra vez, en algunos otros estados incipientes de posibilidades me ha dado por cantar, también en otras circunstancias rutinarias, para qué negarlo. El ojalá, Fue en ese cine, A por el mar, Anda, y por supuesto Y cómo es él.
Comprenderán que la mayoría de composiciones de estos autores, que son dos: Silvio Rodríguez, Aute, y el tercer hombre Perales, no son la alegría de la huerta, pero es que yo sueño paradigmáticamente, me lo recordaba, no hará un año, un amigo que también tiene su gusto por Sabina, que ya no sé si es el mejor pero es cronista certero “no hay nostalgia peor/ que añorar lo que nunca/jamás/sucedió…” Sabina a cuenta de eso se había dado un viaje A: “Buenos Aires/ es como contabas/ hoy fui a pasear…”. A día de hoy no me ha dado a mi por llorar, a Sabina sí que sí. Buenos Aires debe ser nostalgia, como el Madrid de los Austrias.
Estoy cantando, venía a decirles en circunstancias normales y adversas, porque tengo un mueve-mueve del corazón a la polla, y de aquesta a la cabeza. Me ha sucedido varias veces en la vida, y el repertorio no cambia. Porque sí, soy un antiguo que nada tengo que ver con el ipod… ni se traducir bien la canción del brasileño Fransia Fransia Asíonosedesancha, que sabrán lo que es sin entender una jota.
Bien, la nostalgia me la disipa con su repertorio de palabras, con grandes silencios, escritas por esa interactuación de la nada que es Facebook, mi querido guitarrista jesusico Fernández que tomando mi relevo ha ido este año a trabajar a Fiturrrrrrrrrrrrrrrrrrr, y le ha ocurrido una cosa-gajes-de- oficio. Dice que la directora de IFEMA le dijo que a la feria no podían entrar instrumentos y recurrente, y ante la inminente actuación, ha emulado a esos hombres de negocios, jajajaaj, y ha sacado su portatrajes y ha entrado como si tal cosa. Él que se ríe por lo que nos une, acude al barrio de nuestras vivencias dis-generacionales para poner en todo lo alto el sustrato de la ocurrencia.
Todo esto lo deja dicho en Facebook y yo me entero cuando vuelvo a abrirlo esperándome otra casa y de otro. La vida artística es así. El Madrid de los rigores también, y la nostalgia peor, hay, la nostalgia peor te da por cantar. Mañana a la orquesta que lleva de vocalistas al cuñao de una que me quiere alquilar un local y a un guarda civil en activo, le pido Guantanamera, Guajira…. Porque estamos en un pueblo y en los pueblos no hay nostalgia, hay catetos y forasteros, más, si andan en fiestas.

martes, 3 de enero de 2012

Un cuento revelado



El gato se atusaba contra la pierna. El gato herido sabía que así iba a pasar la Nochebuena y la Nochevieja, quizá viniera alguien para Reyes. Los gatos de los pueblos no tienen ningún valor para sus humanos.
El pintor, entre frío y agua intentaba sacarle color a aquello, cuando la furgona paró y le preguntaron si había visto a Manuel el que había sembrado las habas. El pintor contrarió el comentario a los que no veían quien era él, ni qué hacía, sólo les interesaba encontrar al susodicho, para algo, quizá importante, pues estaba cayendo la noche.
Entre las pocas risas de los bares, el amigo dice que la crisis económica crea una conciencia, una nueva conciencia, una mala conciencia. Se apagaron las risas rotas, se encendió la Nochevieja, se puede despeñar el gato, nunca hacer el ridículo: robar, matar no es hacer el ridículo excepto cuando te pillan, y aún así, lo cantó el cantautor que tanto le gustaba ‘la dignidad y la belleza’. Lo último es hacer el ridículo. El gato herido puede arañar aún, pero a la felpa que cubre la pierna se acerca a restregar su pelaje, más pelaje que heridas. Ser ridículos es lo peor que se puede ser haya crisis, hayas plantado habas o estés lleno de heridas, vengas en un 4x4 o se caguen en tu putamadre con cariño.
Los dos marroquís follaban por dinero con los payos y a pelo y gratis entre ellos por casta. Bebían güisqui y eran felices por un día frente al mar, pobres y risueños.
La resignación no es una mala consejera, es una putada asumida. La resignación no es ni una actitud, es un Estado. Maldigo al cristianismo por la Resignación y la Redención, ni admiro ni quiero nada a los gatos y a los que buscan a los plantadores de habas, así en abstracto aunque el buscado se llame Manuel: ‘Dios con nosotros’, me importan tres leches. La crisis nos va a cambiar la conciencia a mamporrazos a un sólo tipo de persona: Al que esté al socaire de lo que caiga, no creo a los hombres con impotencia (hombres y mujeres) creo en el hombre revelador, rehecho y reconstituyente. Y hoy, que iba a contar un cuento de navidad en tercera persona, acabo con un alegato absolutamente cristiano: ‘por sus obras los conoceréis’: dónde no hay más que acción, vida y riesgo. El resto, que os lo de 2012.